Bizkaia armoniza el impuesto de plusvalías con Araba y Gipuzkoa

Todavía quedará debatir y votar sobre las exposiciones de motivos finales, pero Bizkaia ha dado un paso decidido para converger con Araba y Gipuzkoa en el controvertido impuesto de plusvalías, el tributo que se aplica cuando se dona, se hereda o se vende un inmueble, y grava la revalorización del inmueble desde su compra hasta su venta. Se fija el tope en el 30% también. Y se hace, además, con los votos favorables de todas las formaciones políticas, salvo el Grupo Popular, enrocado en su perfil más españolista: bajada de impuestos, eliminación de tributos...

Han sido los únicos, porque los partidos vascos representados en las Juntas Generales de Bizkaia han dado su visto bueno a armonizar el tipo máximo de gravamen del impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos urbanos [la plusvalía municipal] con un límite del 30%. No obstante, tanto jeltzales como socialistas han dejado patente su disconformidad con la redacción de varios párrafos y se emplazaban a la próxima sesión plenaria para ofrecer su valoración definitiva.

Y es que, fue una sentencia del Tribunal Constitucional la que obligó a modificar la norma foral que regulaba este tributo (15%) aunque finalmente se ha entendido que es más conveniente elevarlo al 30% porque, según ha explicado la juntera Arantxa Urkaregi (EH Bildu), "los ayuntamientos tienen más opciones de establecer la tasa que precisen según su propio conocimiento".

No ha sido la única figura tributaria que ha obtenido el respaldo de los grupos. En este caso, dos impuestos concertados con el Estado español: la tasa Tobin y la tasa Google. La primera grava las adquisiciones de acciones. "No se aplicará a toda adquisición de acciones de sociedades españolas, sino que se limita a las de aquellas sociedades que tengan acciones admitidas a negociación en un mercado regulado, con independencia de que la transacción se ejecute o no en un centro de negociación, y que además tengan un valor de capitalización bursátil superior a 1.000 millones de euros", han ilustrado. El tipo impositivo será del 0,2% y según los primeros cálculos podría dejar unos 100 millones de euros.

La segunda, la tasa Google, obliga a los contribuyentes a tributar a la Hacienda de Bizkaia -cualquiera que sea el lugar en que tengan su domicilio fiscal- "en proporción al volumen de prestaciones de servicios digitales sujetas al impuesto realizadas en Bizkaia, cuando sea éste el lugar en el que estén los usuarios". Este impuesto, cuyo tipo será del 3%, se aplicará a aquellas empresas que facturan al menos 750 millones de euros a nivel global, obteniendo al menos 3 millones de euros dentro de Bizkaia a través de la prestación de servicios como la transmisión de datos, la publicidad o las redes sociales.

Fuente: www.deia.eus

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